viernes, 7 de mayo de 2010

EL PORTACOZ

Esta mañana me ha tocado sufrir al portacoz del Ayuntamiento y, sinceramente, se me ha atragantado el desayuno. ¿Cómo es posible tanta farfolla revuelta con tanto dislate y tanto desvarío?. Comprendo que para restar protagonismo a la noticia de las irregularidades que han cometido con el puente, la Alcaldesa nos azuce a sus leales,.., aunque solo sea para que hagan el ridículo y den de qué hablar. Con tal de que se oculte el atropello del puente donde se nos han chuleado 14 puestos de trabajo, si, si, 14 contratos, 14 sueldos tan necesarios en estos momentos para muchas familias de este pueblo. Porque, con independencia de otros chanchullos, eso es lo más penoso, como así consta en el comunicado de la oposición, cercenado en esta parte por la tijera de la radio afecta.

Me puedo imaginar el realdecretoley que tiene que elevar el real presidente de la Junta de Extremadura para dar luz verde al proyecto energético. Igual que me imagino a este pobre hombre decepcionado, pero a la vez ilusionado, a este ciudadano que, como ciudadano, tiene la obligación de informar a los ciudadanos. Puedo sentir su tranquila desazón, su animado desaliento, de saberse un capaz de definirse así mismo con un epíteto y su antónimo a la vez.

¿Quién dijo que la política era el arte de lo posible?, oyendo a este hombre mas bien se diría que es el arte del despiporre verborreico, del despilfarro prosopopeyico y del desgarro lingüístico. Una auténtica orgía de despropósitos y necedades, en un denodado intento de muñequización vecinal desde el más absoluto desprecio hacia unos oyentes para los que reivindico el derecho a un desayuno reparador, pero eso sí, con la afectación propia de un licenciado en gramática … parda.

Pero, ¿qué podíamos esperar…?