miércoles, 8 de junio de 2011

Opositando a Intereconomia

Sobre el artículo original del director de Radio Interior, he tachado sus ataques a mancomunidad y en rojo he introducido lo que nunca quiso publicar la radio in-dependiente sobre las tropelías del PP


La sentencia de la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx) que anula los acuerdos adoptados por la Mancomunidad de Municipios de Sierra de Gata en la sesión extraordinaria de pleno de 3 de noviembre de 2008 del 9 de octubre de 2009 es la mayor reprimenda que se puede hacer a un dirigente político y a sus cómplices. Es inusual encontrar en un fallo judicial tal cúmulo de reproches por las numerosas irregularidades cometidas.

En ese pleno se expulsó al Ayuntamiento de Moraleja por no abonar una deuda de 146.819,37 euros correspondiente al servicio de recogida de basuras, algo reconocido tanto por el deudor como por la demandante. Pero la Mancomunidad de Sierra de Gata elaboró precipitadamente un informe carente de rigor en el que solicitaba una indemnización de 1.454.050,59 euros en concepto de daños y perjuicios. tomó posesión como concejal, ilegalmente una persona que no tenia derecho a ello, no habiendo convocado legalmente a todos los concejales, sin entrar en apreciaciones sobre la autenticidad de las firmas y fechas de las supuestas renuncias, ni en la desaparición de un acta de concejal

La sentencia señala diversos atropellos que, por mucho que se excuse el PP presidente, Alfonso Beltrán, tenían una elevada intencionalidad política: 1) El informe Nombre del concejal que tomaría posesión no figuraba en el orden del día de la sesión plenaria; 2) Fue elaborado después de convocar la sesión; 3) No fue puesto a disposición del grupo socialista del Ayuntamiento de Moraleja; 4) No se informó al ayuntamiento al pleno de la demisión del concejal González Cava, ni de las supuestas renuncias posteriores ni de las consecuencias que acarrearía su expulsión; 5) Se incorporó a la decisión del pleno de forma "sorpresiva" y 6) No fue tratado previamente en la NINGUNA Comisión Informativa Especial de Hacienda.

Un fallo judicial como éste, en un contexto político decente, levantaría los cimientos del ente comarcal PARTIDO POPULAR, más afanado en tapar turbios asuntos que en gestionar con rigor democrático los bienes de los administrados. La Mancomunidad de Sierra de Gata El gobierno de la derecha vulneró los derechos fundamentales de información y participación y una norma esencial para el funcionamiento del pleno, como es que la documentación a debatir sea conocida con anterioridad por los asistentes a un pleno. Alfonso Beltrán El PP permitió, con su actitud, un ataque a las normas elementales de transparencia informativa y a la propia "racionalidad del funcionamiento del sistema democrático y el Estado de derecho”. Y lo dice textualmente unasentencia, pues considera “falsa y engañosa la motivación de la urgencia extrema para la celebración del Pleno, y con el único objetivo de hurtar el derecho de asistencia a los concejales” del PSOE.

La Mancomunidad de Sierra de Gata EL PP se saltó a la torera el Reglamento de Organización, funcionamiento y Régimen Jurídico de las entidades locales y violó el artículo 14 de sus propios estatutos. Y por si fuera poco, echó por tierra un derecho constitucional al no poner en manos de su denunciado la información necesaria para defenderse.

En una sentencia de 12 7 folios, el TSJEx sentencia, “La Alcaldesa carecía de potestad administrativa para convocar el Pleno de urgencia, de ahí que deba declararse, no solo disconforme a Derecho, sino vulnerador del derecho de participación política señalado, en tanto que los concejales no tenían tiempo para examinar y estudiar los temas sujetos al orden del día para emitir una opinión fundada sobre los temas a tratar, no encontrándose tampoco motivada la razón de urgencia en la toma de posesión del nuevo concejal”. apenas dedica unas líneas a recordar que el revolcón judicial sufrido por la Mancomunidad de Sierra de Gata no libera a Moraleja de hacer frente a sus pagos. Sin embargo, Alfonso Beltrán sólo ha entendido el mensaje que libera su conciencia. Convencido de que el temido varapalo está motivado por un "defecto de forma", sostiene que la sentencia le otorga la razón, algo que sólo podemos entender como un insulto a la inteligencia. Lo dijo un director de cine francés: "La tontería es infinitamente más fascinante que la inteligencia. La inteligencia tiene sus limites, la tontería no".

QUE PENA QUE EL PERIODISTA IN-DEPENDIENTE SOLO TENGA TIEMPO DE LEER LAS SENTENCIAS QUE LE INTERESAN, y se olvide de las chiquicientas en las que la derecha vulnera los derechos fundamentales